martes, 13 de abril de 2010

Etica Y Sociedad

ETICA Y SOCIEDAD
Leer el libro del GENESIS, mostrado en la Biblia y el libro “EL ORIGEN DE LA FAMILIA LA PROPIEDAD PRIVADA EL ESTADO de Federico Engels.
Es alentador leer estos dos libros “El GENESIS” Y “EL ORIGEN DE LA FAMILIA LA PROPIEDA PRIVADA Y EL ESTADO” y descubrir como se movían nuestras sociedades pasadas desde el salvajismo, la Barbarie hasta llegar ah lo que nosotros llamamos civilización, pasando por distintas etapas de la formación de la familia, como son la Familia consanguínea, familia Punalúa, Familia Sindiásmica, familia monogámica. Entender estos aspectos de la investigación de Federico engels e interrelacionarlos con el libro de la biblia “Génesis”. Descubro una clara relación casi paralela de los acontecimientos pasados en torno a la formación de la Sociedad en la que nos desenvolvemos hoy en día.


EL ORIGEN DE LA FAMILIA LA PROPIEDAD PRIVADA EL ESTADO

La familia sindiásmica. En esta etapa un hombre vive con una mujer, pero de tal suerte que la poligamia y la infidelidad ocasional siguen siendo un derecho para los hombres, aunque por causa económica la poligamia se observa raramente. (Pág. 35)
El GENESIS

2 Y dijo Saray a Abram: «Mira, Yahveh me ha hecho estéril. Llévate, pues, te ruego, a mi esclava. Quizá podré tener hijos de ella.» Y escuchó Abram la voz de Saray.
(Gen. 16, 2)




El iroqués no sólo llama hijos a hijas a los suyos propios, sino también a los de sus hermanos, que, a su vez, también le llaman a él padre. Por el contrario, llama sobrinos y sobrinas a los hijos de sus hermanas, los cuales le llaman tío. Inversamente, la iroquesa, a la vez que a los propios, llama hijos e hijas a los de sus hermanas, quienes le dan el nombre de madre. Pero llama sobrinos y sobrinas a los hijos de sus hermanos, que la llaman tía. (pág. 21).

10 Y dijo Abimélek a Abraham: «¿Qué te ha movido a hacer esto?»11 Dijo Abraham: «Es que me dije: “Seguramente no hay temor de Dios en este lugar, y van a asesinarme por mi mujer.” 12 Pero es que, además, es cierto que es hermana mía, hija de mi padre aunque no de mi madre, y vino a ser mi mujer. 13 Y desde que Dios me hizo vagar lejos de mi familia, le dije a ella: Vas a hacerme este favor: a dondequiera que lleguemos, dices de mí: Es mi hermano.» (Gen 20, 10-12.)


Por lo menos, en cuarenta tribus de América del Norte el hombre que se casa con la hermana mayor tiene derecho a tomar igualmente por mujeres a todas las hermanas de ella, en cuanto llegan a la edad requerida. (pág. 38)

26 Labán dijo: «No se usa en nuestro lugar dar la menor antes que la mayor. 27 Cumple esta semana, y te daré también a la otra por el servicio que me prestarás todavía otros siete años.» 28 Así lo hizo Jacob; y habiendo cumplido aquella semana, le dio por mujer a su hija Raquel. (Gen. 29, 26-28).